Mundos permeables...

Creí que mi mundo tenía estructura,
con pilares robustos e inamovibles,

pero mi mundo estaba hecho de amor
esa cosa insustancial, e incorpórea,
que dista bastante de tener solidez,

mi mundo se rompe, como una ola embotellada,,
y todo son cristales, sobre los que he de caminar,
cristales mojados... de colores increíbles,

no he de asustarme, ante un mundo de ausencia,
no he de callar, cuando todo me pida silencio,

quisiera creer...
que entre toda esta desidia,
aún puede haber un diminuto trozo de vida,
y que entre toda esta perseverante amargura,
todavía pueden quedar migas de paz y belleza,

sé que mis ojos prefieren no mirar,
que el oído me funciona por puro instinto
y que mi tacto está en una playa... naufragado,

el dolor, como método de unión, resulta desolador,
pero soy totalmente incapaz de repudiarlo
porque ese dolor es, hoy por hoy, todo lo que tengo,

mi mundo dejó de ser mío en algún momento,
y me apena pensar que hay mundos...
que conservan siempre su propiedad,

los mundos deberían ser permeables,
porque la impermeabilidad...
es la condena menos benevolente que existe.


Sólo busco la velocidad... para detenerla.