Sólo sentir...

Me asalta un color, como hacen los alientos,
me deja un beso, y me susurra... “tonto”

me pongo tenso, quizá reticente,
este tiempo ni siquiera se ha presentado

más bien me ha invadido, al asalto,

tus pensamientos, las tropas invasoras,
mi cuerpo, el limitado campo de batalla,

el banderín de la victoria
clavado en occidente
espera que el sol decline de nuevo
la eterna invitación a quedarse,

las noches suman en el campo de batalla,
van amontonando las razones muertas,
los vestigios doblados, las lanzas caídas,

la oscuridad no impide ver las armas,
inertes, y desposeídas de su poder
rotas al fin, goteando aún su criterio,

ese... “late o revienta”
autoflagela el músculo cardiaco,
si la libertad fuese sangre
claro que latiría enérgico,

no acepto los designios divinos
ni las normas convencionales
¿por qué no desaparecen sin más?

puedo visualizar un mundo nuevo
me lo cuentan unos labios besables,

al tiempo que veo palabras
en una risa que brota
y en una mirada que brilla,

palabras sueltas y encajables
como los silencios venideros,

he podido escuchar a la ficción...
redactando sus presagios
diciendo alto sus etéreas predicciones,

no entiendo porqué la realidad permanece callada.